Pérdida auditiva en niños en edad escolar: recomendaciones

La audición es esencial para aprender a hablar, participar de la vida social, en los procesos de aprendizajes. Sin embargo, pocas veces se realizan chequeos de audición. Y, en muchos casos, se detecta la disminución auditiva con el comienzo de las clases.

Las pérdidas auditivas leves son difíciles de detectar ya que las dificultades que presentan los niños se pueden confundir con distracciones, falta de atención o trastornos del desarrollo. Asimismo, muchos chicos no suelen darse cuenta de su pérdida auditiva. Algunos, de manera inconsciente utilizan estrategias para comprender lo que quiere oír: leer los labios o hablar fuerte.

Las consecuencias de la hipoacusia en el desarrollo del niño dependen de la magnitud de la afección, de la edad de manifestación y del tiempo de evolución. Algunos estudios muestran que déficit auditivos leves a moderados pueden asociarse a problemas de habilidades comunicacionales, problemas de lenguaje, de dicción, dificultades escolares. 

De todas maneras, es importante detectar la pérdida de audición a tiempo por medio de una audiometría u otros estudios que aseguren a los niños el desarrollo pleno de sus potencialidades. 

Pérdida auditiva infantil: ¿Cómo detectarla en el aula?

Algunas señales pueden indicar a los docentes si un alumno tiene dificultades para escuchar:

• El niño no responde cuando se lo llama o se le pide algo
• Con frecuencia pide que se le repitan las consignas
• Ante una instrucción clara tiende a imitar a sus compañeros
• Se le dificulta seguir las conversaciones entre sus pares
• Malinterpreta las instrucciones o no cumple órdenes
• Se nota una diferencia en la comprensión de consignas en distintos entornos, silenciosos o ruidosos
• Tiene dificultades para distinguir la fuente de sonido
• Tiene un bajo rendimiento escolar
• Comete falta de ortografía y le resulta difícil realizar un dictado
• Manifiesta dificultades para comprender textos
• Es posible que se aísle de sus compañeros y no participe de los juegos grupales
• Tiene dificultades para aprender nuevo vocabulario

En estos casos, los docentes deberán comunicarse con los padres y sugerirles una consulta con un otorrinolaringólogo.

Por el contrario, si el alumno ingresa al colegio con un diagnóstico de hipoacusia previo y tiene audífonos o implante coclear, la situación es diferente. En este caso, el conocimiento previo por parte de los maestros resulta vital para un correcto abordaje dentro del aula. Por ejemplo, características del dispositivo auditivo, expectativas de lenguaje y comprensión.

Puede suceder que se necesite un asesoramiento especial de profesionales de la audición que trabajan con el niño.

¿Cómo enseñar a niños con pérdida auditiva?

Es importante que los docentes puedan fomentar la integración de chicos con problemas de audición. Para esto, deben informarse sobre qué actividades de grupo son más convenientes. Asimismo, poder darle al niño todas las facilidades posibles de acceso a la información.

Algunas pautas de trabajo para llevar adelante pueden ser:

• Generar un entorno auditivo saludable dentro del aula
• Sentar al alumno lo más cerca posible al escritorio del docente
• Como maestro mantenerse en un lugar fijo al momento de hablar en el aula, en lo posible de frente
• Chequear la comprensión de consignas con preguntas. Si fuese necesario, apoyar la consigna con material gráfico o escrito
• En algunas ocasiones es importante que el docente pueda articular cada una de las palabras, para que el alumno pueda leerle los labios
• Todo lo que se explique apuntarlo en el pizarrón para que quede mucho más claro
• Habilidades como la empatía permiten disminuir los obstáculos que los niños con disminución auditiva encuentra en la jornada escolar, por ejemplo: dificultades de entendimiento, molestias que pueden ocasionar el ruido de fondo, los gritos de otros niños.

La pérdida auditiva no debería ser un problema al momento de incorporarse a la escuela. Aunque en muchas ocasiones suele ser un desafío. De todas maneras, los docentes y compañeros son un pilar fundamental para normalizar el día a día.

Al mismo tiempo, los padres deben trabajar en conjunto con los docentes para lograr que la hipoacusia no se convierta en un obstáculo en el aprendizaje. 

Prevención de los problemas auditivos

Prevenir o detectar la pérdida auditiva en niños a tiempo y avanzar en un tratamiento adecuado es fundamental para que los niños puedan avanzar en la escuela, integrarse socialmente y poder interactuar con sus pares.

Las dificultades auditivas pueden ser diagnosticadas por medio de pruebas realizadas por un otorrinolaringólogo. La detección precoz de la pérdida de audición permite realizar acciones oportunas como adaptación de prótesis auditivas, implante coclear, que le aseguren al niño el logro pleno de sus potencialidades.

Es importante que los padres estén en contacto con la escuela y reaccionen ante la mínima sospecha de que su hijo sufre problemas auditivos o se le puedan estar agravando. Como consecuencia, es necesario consultar a un especialista de oído. 

Fuentes:

Problemas auditivos en preescolares, según estudio audiológico y percepción de educadores. Región Metropolitana, diciembre 2005. Versión digital: https://scielo.conicyt.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0370-41062006000300003

Tinnitus o acúfenos: ¿Por qué me zumban los oídos?

El tinnitus, también conocido como acúfenos, es la percepción de zumbidos, silbidos, pitidos en uno o en ambos oídos, y en algunos casos en el interior de la cabeza, sin ninguna fuente externa que lo provoque. Estos sonidos se pueden experimentar de forma temporal. Aunque, también pueden llegar a ser constantes y permanentes.

Según investigadores del CONICET el tinnitus afecta entre 736 y 1472 millones de personas en el mundo, de las cuales un 20 o 30% sufren los zumbidos de forma severa. Esto se puede deber a diversas causas: estrés, infecciones en los oídos, exposición a ruidos fuertes, taponamiento por acumulación de cerumen. También, los acúfenos están relacionados con la pérdida de audición y el consumo de ciertos medicamentos. Conocé más a continuación.

¿Cuáles son las causas del tinnitus? 

Son varias las causas que pueden producir acúfenos. Algunas de ellas son:

• Exposición prolongada a ruidos fuertes: Los ruidos de maquinaria pesada, armas de fuego, escuchar música a alto volumen con auriculares durante periodos largos, se relacionan con la pérdida auditiva y la aparición de tinnitus.
• Acumulación de cerumen en los oídos: El cerumen tiene la función de proteger el canal auditivo. Sin embargo, cuando se acumula en grandes cantidades y es difícil eliminarlo naturalmente, puede causar pérdida de la audición o irritación de la membrana del tímpano y provocar tinnitus.
• Envejecimiento: En muchos casos la audición puede empeorar con la edad, por lo general a partir de los 60 años. Dicha disminución auditiva puede causar acúfenos.
• Enfermedad de Ménière: Puede ser un síntoma temprano de la enfermedad de Ménière, un tipo de trastorno del oído interno.
• Traumatismos en la cabeza o en el cuello: Un golpe en la cabeza o en el cuello puede afectar el oído interno, los nervios auditivos o las funciones cerebrales vinculados con la audición. Estas lesiones pueden provocar zumbidos en un solo oído.
• Efectos secundarios de medicamentos: Ciertos medicamentos pueden causar o empeorar el tinnitus. Entre ellos están la aspirina (tomar 12 o más por día), antidepresivos, diuréticos, entre otros.  
• Disfunción mandibular: Problemas en la articulación temporomandibular, ubicada delante de las orejas en la unión de la mandíbula con el cráneo, puede provocar tinnitus.

Tipos de acúfenos

El tinnitus puede variar en intensidad y forma. Puede ser percibido de diferentes maneras según cada persona.  Existen distintos tipos de tinnitus. Entre ellos encontramos:

1. Tinnitus subjetivo: 

Es el más común. Se trata de un zumbido en los oídos que solamente puede escuchar la persona que lo padece. Se puede deber a la exposición a ruidos fuertes, problemas en el oído externo, medio o interno. También, puede existir alguna dificultad en los nervios auditivos.

2. Tinnitus objetivo: 

Este tipo de tinnitus puede ser escuchado por el médico cuando efectúa un control o prueba de audición. Es muy poco frecuente y puede deberse a un problema en los vasos sanguíneos, contracciones musculares o un problema de los huesecillos del oído medio.

3. Tinnitus somático:

Generalmente es producido por espasmos musculares en la oreja o en el cuello. De esta manera, cualquier cosa que haga que el cuello se retuerza o gire, así como problemas dentales  pueden causar tinnitus somático. En la mayoría de los casos, una terapia de masajes puede aliviarlo.

4. Tinnitus pulsátil:

Es un tipo de tinnitus poco común, se debe a un trastorno de los vasos sanguíneos. Suena como una pulsación rítmica en el oído y generalmente coincide con los latidos del corazón. Algunas de las principales causas son: presión arterial alta, tumores de cabeza y cuello, vasos sanguíneos irregulares, entre otros. 

¿Cómo detectarlo?

1. Escuchas zumbidos o pitidos repetidos y repentinos en uno o en ambos oídos y en el interior de la cabeza.
2. Sientes pérdidas de la audición repentina o mareos.
3. El zumbido del tinnitus te hace experimentar síntomas de malestar como dolores de cabeza, ansiedad, sueño, dificultades de concentración.
4. En muchos casos, a la persona le molesta la quietud, porque esta circunstancia aumenta el zumbido.
5. Por el contrario, para algunos sujetos con tinnitus el ruido excesivo o sonidos de alta frecuencia pueden resultar molestos y dolorosos. Esto se conoce como hiperacusia. 

Diagnóstico y tratamiento para tinnitus

El diagnóstico del tinnitus lo debe realizar un médico especialista en el oído (ORL).  Aún no existe un tratamiento efectivo que elimine el acufeno a largo plazo, aunque sí existen formas de disminuir el malestar que provocan los zumbidos.

Por ejemplo, algunos remedios naturales y cambios en el estilo de vida como evitar la fatiga y el estrés, llevar hábitos de vida más saludables, realizar ejercicios de relajación, pueden ayudar a disminuir los acúfenos.

Por otra parte, algunos audífonos permiten enmascarar el zumbido del tinnitus al emitir unos sonidos terapéuticos.  También, te invitamos a probar la app de Beltone Tinnitus Calmer que ofrece una combinación de terapia de sonido con ejercicios de relajación y respiración para aliviar el tinnitus. 

¿Cómo prevenir la aparición de acúfenos?

En la mayoría de los casos, tener algunas precauciones puede ayudar a prevenir la aparición de tinnitus:

• Usar protectores auditivos: Los tapones para los oídos protegen al conducto auditivo de la exposición a ruidos fuertes que puedan dañar los nervios auditivos y provocar pérdida de audición y acúfenos.
• Bajar el volumen: La larga exposición a música amplificada o escuchar música a volumen alto con auriculares puede provocar tinnitus.
• Cuidar la salud cardiovascular: Mantener los vasos sanguíneos saludables mediante actividad física y una buena alimentación puede ayudar a prevenir la aparición de tinnitus vinculado con las afecciones en los vasos sanguíneos.

Es importante tener en cuenta que, por lo general, la pérdida auditiva es una experiencia indolora y el resultado más común es el tinnitus. Asimismo, es necesario resaltar que el efecto dañino en los nervios auditivos es acumulativo en el tiempo, por lo que la exposición constante a ruidos de alta frecuencia puede desarrollar tinnitus en el tiempo. 

¿Cuáles son las causas de la pérdida auditiva?

En la mayoría de los casos la disminución auditiva se desarrolla lentamente con el paso del tiempo. Sin embargo, si bien el envejecimiento suele ser la causa más común, no es la única.

Existen varios hábitos que, aunque parezcan inofensivos, pueden dañar la salud auditiva. Escuchar música a alto volumen a diario es uno de los más conocidos. Pero, ¿sabías que el consumo excesivo de bebidas alcohólicas y de tabaco también puede producir pérdida de audición?

Te invitamos a conocer los principales hábitos y causas de las lesiones de oído. Seguí leyendo. 

7 causas de la pérdida de audición

1. Escuchar música a muy alto volumen:

Cuando se escucha cualquier sonido a alto volumen de forma prolongada puede perjudicar los oídos. Es más dañino cuando se usan auriculares. Según un estudio de la Universidad de Leicester (Reino Unido) la pérdida auditiva se produce debido a que el sonido muy alto altera el recubrimiento del nervio auditivo que lleva las señales del sonido directamente al cerebro.

2. Sobrepeso u obesidad

Según una investigación del Hospital de Brigham (Boston, EE.UU.) las personas con un alto índice de masa corporal tienen un 17% más de riesgo de desarrollar algún problema auditivo en el futuro, que aquellos que se mantienen en su peso recomendado.

3. Fumar

El Journal of the American Medical Association publicó un estudio donde especifica que fumar puede estar asociado con la pérdida de audición. Las personas que fuman regularmente tienen un 70% más de probabilidades de tener disminución auditiva. Asimismo, la investigación también expuso que los fumadores pasivos tienen más probabilidades de tener problemas auditivos que aquellos que no están expuestos a un miembro del hogar que fuma.

4. Uso de hisopos o introducción de otros objetos dentro del oído

Muchas personas utilizan los hisopos para quitar la cera que se va acumulando en los oídos. También se suelen utilizar las uñas o lápices. Todos estos elementos pueden provocar roces en el conducto auditivo y, en algunos casos, se puede ocasionar una rotura de la membrana timpánica causando sordera.

5. Consumo de bebidas alcohólicas

Varias investigaciones han demostrado que el consumo excesivo de bebidas alcohólicas puede provocar daños en los nervios responsables de percibir los sonidos. Asimismo, puede dañar la corteza auditiva central del cerebro llevando a una disminución de la capacidad auditiva.

6. Cambios bruscos en la presión del aire

Cuando se realizan actividades como buceo o viajes en avión, la presión del aire se reduce conforme se sube y aumenta cuando se desciende. Si la presión del aire no se equipara a ambos lados del tímpano, la parte que sufre más presión se abomba hacia el lado contrario, lo que produce dolor y pérdidas de audición puntuales.

Por lo general, los más propensos a estos problemas son los niños porque suelen tener la trompa de Eustaquio estrecha u obstruida debido a una infección o mucosidades. La trompa de Eustaquio es un conducto que conecta el oído medio con la parte posterior de la garganta por detrás de la nariz. Tiene la función de equilibrar la presión del oído medio con la del aire exterior.

7. Traumatismo en la oreja o en la cabeza

Un balonazo, un accidente de tránsito, caídas, entre otros, que hayan provocado un traumatismo directo en la oreja pueden provocar lesiones en el oído y una posterior disminución auditiva. 

¿Cómo evitar la pérdida auditiva?

Se pueden prevenir algunas lesiones en el oído teniendo en cuenta lo siguiente: 

• No meterse nada en los oídos como hisopos de algodón, los dedos o cualquier otro elemento con el fin de eliminar la concentración de cerumen. Si el cerumen provoca molestias, dolor o disminución auditiva visitá al otorrinolaringólogo.
• Bajar el volumen de la música, sobre todo cuando se escucha con auriculares o dentro de un auto.
• Utilizá casco cuando andes en bicicleta, moto, monopatín, para evitar traumatismos de cráneo o golpes directos en las orejas,  en caso de accidente. 
• Puedes usar protectores auditivos cuando vas a nadar, en determinados entornos laborales ruidosos o en conciertos, sobre todo cuando te ubicas cerca del escenario o de los altavoces. 
• Mantente alejado de ruidos fuertes y molestos, tales como ruidos del tránsito, una explosión, fuegos artificiales, una cortadora de césped, maquinaria. 

Pérdida auditiva: tratamiento

La prevención siempre es el primer paso para no sufrir o disminuir las posibilidades de lesiones en el oído.

De todas maneras, si existen motivos para preocuparse porque no se escucha nítidamente, se oyen pitidos u otros sonidos extraños como zumbidos en el oído, existe una dificultad para oír sonidos agudos o de alta frecuencia, entre otros. En estos casos es recomendable consultar con un especialista de oído, nariz y garganta.

El profesional podrá establecer un diagnóstico y tratamiento según qué parte del oído esté lesionada, la causa y gravedad de la lesión. 

En algunos casos, las lesiones pueden ocasionar pérdida auditiva temporal, mientras que otras más graves pueden generar pérdidas auditivas permanentes. Si tienes alguna duda, no dudes en consultarnos. 

¿Qué son los protectores auditivos?

Los protectores auditivos, también conocidos como tapones, tienen como principal función proteger a los oídos principalmente del ruido y del agua. Aunque también de que no ingrese al canal auditivo arena o viento. El uso de tapones para los oídos ayuda a evitar daños en la capacidad auditiva de las personas.

A continuación respondemos algunas dudas frecuentes que surgen al momento de comprar y usar protectores auditivos. Continúa leyendo.

¿Cuándo se debe usar protectores auditivos?

Los protectores auditivos se pueden utilizar para distintos fines:

• Proteger los oídos debajo del agua: Se usan tanto en el mar como en en una pileta. El fin es evitar que entre agua por los oídos. Estos tapones se deben adaptar correctamente a cada oreja en particular y son la mejor medida de prevención para evitar infecciones como otitis.
• Conciliar el sueño: En algunas ocasiones los protectores auditivos pueden ser una solución para aquellas personas que no pueden conciliar el sueño por diferentes motivos: trabajan de noche y necesitan dormir de día,  el ruido de la calle, por motivo de una fiesta, viajar frecuentemente, y otros.
• Proteger el canal auditivo en entornos ruidosos: La exposición a ambientes de mucho ruido, superior a 80 dB, durante largos periodos de tiempo puede provocar problemas de audición. El uso de tapones para los oídos puede atenuar el ruido, ayudando a disminuir el riesgo de disminución de la capacidad auditiva, la aparición de zumbidos en los oídos, alteraciones en el rendimiento laboral, entre otros.  También hay músicos que utilizan protectores auditivos en sus conciertos para evitar daños en el sistema auditivo.

Tipos de protectores auditivos

Existen tapones auditivos de diferentes formas y materiales. Su elección depende del uso que la persona le quiera dar. También, se pueden adquirir para un solo uso o reutilizarlos. En este último caso se realizan a medida del oído de la persona.

Los protectores auditivos vienen de diferentes materiales. Entre ellos:

• Silicona blanda: Se amoldan con facilidad al oído. Son recomendados para dormir debido a que algunos se realizan con silicona suave hipoalergénica.
• Espuma suave: Son moldeables y de fácil adaptación. Una vez introducidos en el oído se amplían hasta ajustarse bien. Su diseño permite usarlos una sola vez.

¿Cómo colocarse los protectores auditivos?

Es importante colocar el protector auditivo de forma tal que quede totalmente dentro del oído. Desde AUDIFIM recomendamos seguir los siguientes pasos:

1. Siempre con las manos limpias se debe sujetar con una mano la parte de arriba de la oreja y con la otra introducir el protector auditivo.
2. Se debe mantener el dedo apretando por unos segundos para que se expanda dentro del oído. Mientras se expande se irán notando la disminución del ruido.
3. La persona debe comprobar en un espejo que  ninguna parte del tapón quede fuera.

Cuando el protector se colocó correctamente la persona debería oír su propia voz más fuerte.

Por otra parte, en algunos casos el uso de tapones en los oídos puede causar presión en la cabeza, alteración en la percepción de sonidos y de la propia voz. La persona se irá acostumbrando con el uso. En el caso que le genere problemas mayores puede utilizar otros tipos de protectores como orejeras, bandas, etc.

Protegé tu salud auditiva

La pérdida de audición inducida por el ruido ocurre cuando las diminutas células sensoriales del oído interno sufren lesiones al estar expuestas a sonidos demasiado fuertes durante un tiempo prolongado. La distancia con relación a la fuente del ruido también influye.

En AUDIFIM contamos con diversas opciones para proteger tu audición del agua y del ruido tales como:

• Tapones de espuma expansible.
• De silicona, a medida. Se toma la impresión del oído del paciente.
• Vinchas para el agua que evitan que lleguen filtraciones al interior del oído.

La pérdida de audición inducida por el ruido puede ser permanente, aunque se puede prevenir. No dudes en consultarnos.

¿Qué es la hipoacusia o sordera infantil?

La hipoacusia infantil es la incapacidad parcial o total que manifiesta el niño para percibir sonidos en uno o en ambos oídos. La disminución auditiva puede ser leve, moderada o grave. En algunos casos se puede deber a factores genéticos en los recién nacidos, infecciones del oído en niños más grandes, entre otros.

Según el Ministerio de Salud de Argentina entre 700 y 2100 niños nacen anualmente con problemas auditivos.

Durante los primeros años de vida del niño la audición es un factor fundamental para el desarrollo del habla, del lenguaje, el desarrollo emocional y social. De esta manera, el diagnóstico temprano de la hipoacusia infantil mediante una audiometría y otras herramientas es de suma importancia para establecer una estrategia terapéutica adecuada.
 

¿Cómo detectar la sordera en niños? 

En función de la edad o de la etapa de desarrollo del niño los padres pueden encontrar diferentes signos que pueden hacer sospechar de hipoacusia infantil:

• Recién nacidos y lactantes: No se sobresaltan, despiertan o asustan ante ruidos fuertes y repentinos.
• Entre los 3 y 5 meses: El niño no reconoce ni dirige la mirada hacia la fuente de sonido.
• De 6 meses a 1 año: El bebé no es capaz de buscar la fuente de voz o del sonido moviendo la cabeza o el cuerpo para poder observarla. No emite sonidos ni balbucea. Al año, los niños con problemas de audición no dicen sus primeras palabras.
• 2 años: No imita palabras simples, no se voltea cuando lo llaman y no responde a su nombre si está de espaldas a la fuente de sonido. Tampoco se sobresalta con ruidos fuertes.
• 3 años: No ha iniciado el lenguaje, ni repite frases.
• Entre los 4 y los 5 años: No es capaz de hacer frases sencillas, no puede expresar lo que le ocurre o piensa. Si el problema auditivo no es total es frecuente que el niño pregunte “¿qué?” y se le deba explicar varias veces las cosas. Entre otros signos se pueden encontrar: poner la televisión a muy alto volumen, bajo rendimiento escolar, parecer que no presta atención, quejarse de que no escucha, dirigir uno de sus oídos hacia adelante para escuchar, entre otros.

¿Cuáles son las causas de la hipoacusia infantil?

• Antecedentes familiares de sordera congénita
• Infección de la madre durante la gestión debido a rubéola, sífilis, herpes, toxoplasmosis.
• Malformaciones craneofaciales relacionadas con el oído externo, medio o interno
• Peso en el momento del nacimiento inferior a 1,5 k
• Empleo de medicamentos ototóxicos
• Meningitis bacteriana a cualquier edad
• Traumatismo craneoencefálico con fracturas o pérdida de conciencia
• Infecciones en el oído como otitis aguda persistente y la acumulación de cerumen
• Exposición al ruido de alta intensidad durante periodos largos de tiempo
• Bajos niveles de oxígeno en sangre o convulsiones producidas por un parto complejo

Algunos factores pueden generar sordera desde el nacimiento. En otros casos, las infecciones pueden ocurrir a cualquier edad. Por esto, es recomendable evaluar la audición del niño durante todo su desarrollo.

Hipoacusia infantil – Blog Beltone

¿Cómo se diagnostica la hipoacusia en niños recién nacidos? 

Actualmente se ha vuelto común realizar pruebas auditivas a niños recién nacidos antes de recibir el alta en el hospital. Es importante que antes de los tres meses de edad se pueda diagnosticar la sordera en el niño.
La prueba de audición para los recién nacidos es indolora y dura pocos minutos. El cribado auditivo neonatal se puede realizar por medio de:

Prueba de emisiones otoacústicas (EOA):

Se coloca un pequeño micrófono en el oído del bebé. Se envían sonidos al oído y se registran los sonidos emitidos por la cóclea en el canal auditivo. Permite determinar los umbrales auditivos para ciertas frecuencias. Si el bebé tiene pérdida auditiva no habrá emisión de sonido.

Potenciales Evocados Auditivos Automáticos (PEATCa):

Se le colocan al bebé electrodos en diferentes partes del oído y del cuero cabelludo. Se presentan estímulos acústicos en cada oído mediante auriculares. El análisis de las ondas auditivas del cerebro determina los umbrales de audición del niño.

Si el bebé no supera la prueba inicial de cribado neonatal no implica que no escuche bien. Puede haber quedado resto de líquido amniótico, por ejemplo. De esta manera, se realiza una inspección a fondo del oído por si el problema se puede detectar en el momento.
 

Diagnóstico de sordera en niños mayores

Entre las herramientas para diagnosticar hipoacusia en niños mayores de 2 años se encuentran:

1. Examinar los oídos para detectar la existencia de anomalías.
2. Audiometría de juego o lúdica: se puede realizar a partir de los 3 años. El niño recibe un estímulo sonoro y como consecuencia debe realizar una acción como armar un rompecabezas, apilar cubos, etc. Pedir a los niños que realicen cosas sencillas suele indicar hasta qué punto oyen y entienden el habla.
3. Audiometría tonal y verbal: Se puede realizar a partir de los cinco años. El niño se ubica en una cabina insonorizada. A través de auriculares se presenta un listado de palabras que el niño debe repetir. Esta prueba también permite registrar las vías aéreas y ósea de cada oído.
4. Examinar la respuesta del tímpano ante una gama de frecuencia de sonidos que permite detectar la existencia de líquido en el oído medio (timpanometría).

¿Cómo es el tratamiento de la hipoacusia infantil? 

El tratamiento de la hipoacusia en niños es interdisciplinario entre pediatra, fonoaudiólogo y, en algunos casos, psicólogo. El abordaje terapéutico puede consistir en la atención temprana del niño y un tratamiento fonoaudiológico adecuado.

En el caso que la pérdida auditiva sea moderada, leve o en un solo oído, se pueden utilizar audífonos para compensar el deterioro auditivo.

Por otro lado, cuando la pérdida auditiva es grave y no se puede utilizar audífonos, existe la opción de realizar un implante coclear, mediante una intervención quirúrgica. Se pueden colocar a temprana edad. Este implante estimula el nervio auditivo.

La detección y tratamiento temprano de la hipoacusia puede evitar mayores daños cognitivos. En AUDIFIM consideramos que cada persona requiere una atención única, por esto cada tratamiento se va adecuar a la causa y la intensidad de la pérdida auditiva del paciente.

Te invitamos a conocer más sobre la hipoacusia en este artículo.

Fuentes:

• Blog Beltone
• Diagnóstico de la hipoacusia infantil por G. Aránguez Moreno. Versión digital: https://www.analesdepediatria.org/es-diagnostico-hipoacusia-infantil-articulo-13054782
• Detección precoz de la hipoacusia infantil por J.J. Delgado Domínguez, Grupo PrevInfad/PAPPS Infancia y Adolescencia. Versión digital: http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1139-76322011000200012

Hipoacusia o sordera: síntomas, causas y tratamiento

La hipoacusia o sordera es la disminución de la sensibilidad o capacidad de auditiva. La persona que padece pérdida auditiva no es capaz de oír sonidos suaves por encima de los 20dB. Esta pérdida se puede dar en uno o ambos oídos. 

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) 432 millones de adultos y 34 millones de niños en todo el mundo padecen pérdida de audición discapacitante (superior a 40 dB en adultos y 30 dB en niños).

La hipoacusia se puede deber a diferentes causas y manifestarse en cualquier etapa de la vida, no solo en la vejez. Por esto, te invitamos a conocer más sobre los tipos de hipoacusia, síntomas y tratamiento. 

¿Cómo saber si tengo pérdida auditiva?

Algunos síntomas que pueden indicar pérdida de audición son:

1. Pedir muy a menudo a las personas que repitan lo que acaban de decir.
2. Sentir zumbidos en los oídos.
3. Creer que las personas de alrededor hablan en voz muy baja o murmuran con frecuencia.
4. Manifestar problemas para entender todas las palabras en una conversación o tener dificultades para entender una conversación cuando se está en grupo o en grandes multitudes.
5. Hablar muy fuerte o  utilizar el volumen de la radio o del televisor demasiado alto.
6. No poder oír sonidos tales como el timbre de casa o el goteo de una canilla.
7. Cuando se está de espalda al interlocutor o a la fuente de sonido la persona tiene  dificultades para escuchar.
8. Cada vez son más difíciles las conversaciones telefónicas.

¿Cuáles son las causas de la hipoacusia?

Las causas de la hipoacusia o sordera pueden ser congénitas o adquiridas: 

Causas congénitas

Las causas congénitas pueden determinar la pérdida de audición poco después de nacer o en el  momento del nacimiento. Los factores pueden ser hereditarios o deberse a complicaciones durante el embarazo y el parto. Por ejemplo:

• Bajo peso al nacer
• Falta de oxígeno al momento del parto
• Rubeola materna, sífilis o cualquier otro tipo de infecciones durante el embarazo
• Ictericia grave (trastornos hepáticos) durante el periodo neonatal. Puede llegar a lesionar el nervio auditivo del bebé

Causas adquiridas

La pérdida de audición se puede dar a cualquier edad debido a:

• Infecciones crónicas del oído
• Traumatismos en el oído o craneoencefálicos
• Exposición excesiva al ruido en entornos laborales. Por ejemplo con máquinas ruidosas o en actividades recreativas (uso de auriculares con el volumen elevado durante periodos de tiempo prolongados)
• Parte del proceso de envejecimiento
• La obstrucción del conducto auditivo causado por cerumen o cuerpos extraños
• Presencia de líquido en el oído (otitis)
• Enfermedad de Ménière
• Algunas enfermedades infecciones tales como el sarampión, la meningitis o parotiditis (papera) 

¿Cuáles son los distintos niveles de sordera?

El nivel de hipoacusia que padece una persona se clasifica en:

• Audición normal: La persona puede oír sonidos suaves por encima de 20 dB.
• Hipoacusia leve: A la persona se le dificulta entender el habla en entornos ruidosos. También, le cuesta escuchar susurros o cuando el volumen de voz es muy bajo. En estos casos, la hipoacusia en el mejor oído ronda entre 25 y 39 dB.
• Hipoacusia moderada: En estos casos al sujeto se le dificulta entender el habla en un volumen normal de voz. La hipoacusia se ubica entre 40 y 69 dB. En este punto cuesta entender el habla sin audífonos.
• Hipoacusia severa: La hipoacusia en su mejor oído se ubica entre 70 y 90 dB. La persona requiere prótesis auditiva o un implante coclear ya que solo puede percibir algunos sonidos fuertes.
• Hipoacusia profunda: En estos casos, la hipoacusia es de más de 90 dB. La persona no puede oír lo que se habla, salvo algunos sonidos fuertes que llega a percibir.

¿Qué tipos de hipoacusia existen?

La hipoacusia no solo se diferencia por grados e intensidad. De acuerdo al lugar del oído donde se ubique una lesión, se pueden diferenciar distintos tipos de hipoacusia o sordera:

1. Hipoacusia neurosensorial:

La lesión se encuentra en el oído interno o en el nervio auditivo. Las causas suelen ser congénitas debido a motivos genéticos o producidos por traumatismos, exposición continua a niveles altos de ruido. Dependiendo del grado o intensidad de la hipoacusia la persona necesita un audífono o un implante coclear para recuperar la audición.

3. Hipoacusia mixta:

Es causada por obstrucciones en el oído externo o medio que impiden el paso de las ondas sonoras al oído interno. También puede deberse a infecciones (otitis), tímpanos perforados, malformaciones del oído medio y externo. Estos casos suelen responder bien con tratamiento médico o con audífonos.

3. Hipoacusia mixta:

Existe pérdida auditiva por problemas tanto en el oído externo o medio como en el interno. La persona escucha los sonidos más bajos y le cuesta entenderlos.

Diagnóstico y tratamiento 

Cuando los problemas auditivos comienzan a interferir en la vida cotidiana, no desaparecen o empeoran, es recomendable contactar con un profesional médico.

El diagnóstico de la hipoacusia se puede realizar a través de varias  pruebas. Entre ellas se encuentran pruebas físicas para detectar algún tipo de lesión, inflamación o cerumen en los oídos y una audiometría.

La situación de las personas que presentan disminución auditiva puede mejorar con el uso de audífonos, implantes cocleares u otros dispositivos de ayuda auditiva.

Es importante tener en cuenta que la detección y tratamiento temprano de la hipoacusia puede evitar mayores daños cognitivos. Además, dicho tratamiento va a depender de la causa y la intensidad de la pérdida auditiva en cada caso.